Imagina un jardín sereno en la ladera suroeste del lago Panguipulli, una obra de dedicación y visión transformada desde cero. Antes de la creación del jardín, la zona estaba dominada por densas formaciones de quila, un tipo de bambú nativo del sur de Chile, cuyo entramado verde oscuro cubría casi por completo la ladera, ocultando la tierra fértil que yacía debajo y la vista impresionante hacia el lago.
El proceso comenzó con la eliminación cuidadosa de gran cantidad de quila, se decidió dejar algunos pocos árboles existentes dispersos dentro de esta vegetación, como guardianes del paisaje y testigos del cambio. Estos árboles se convirtieron en puntos focales alrededor de los cuales se diseñó el nuevo jardín, ofreciendo sombra y estructura a la composición emergente.
A medida que la quila fue desapareciendo, se reveló el potencial de la ladera, y con él, el proyecto de un jardín en pendiente tomó forma. Se diseñaron cuidadosamente recorridos serpenteantes que bajan hacia la playa, invitando a los visitantes a explorar cada rincón del jardín. Estos caminos están bordeados por una variedad de plantas nativas y adaptadas al clima local, seleccionadas no solo por su belleza sino también por su capacidad para prosperar en este entorno, contribuyendo a la biodiversidad del área.
El jardín se integra a la perfección con la casa principal, ubicada en la parte superior de la ladera, mediante estos mismos recorridos y un diseño que respeta el descenso natural del terreno. El jardín cerca de la casa también se caracteriza por estar en talud, con terrazas suavemente inclinadas que abrazan la estructura y se extienden hacia el lago, fusionando el hogar con el paisaje.
La paleta de colores del jardín se inspira en los tonos sutiles del lago y el cielo, con toques vibrantes de flores nativas que atraen a aves y mariposas, creando un ecosistema vivo. A lo largo del año, el jardín cambia, reflejando las estaciones con un nuevo espectáculo de colores y texturas, convirtiéndolo en un lugar siempre fascinante para explorar y disfrutar.